jueves, 25 de febrero de 2021

Contigo puedo ser yo

 Sabéis cuando toda la vida has escuchado cosas malas? Aunque sean de broma? No seas así, no hagas eso, mira que eres rara, tú no eres normal… Esas frases te dejan tocada, te hacen crearte una coraza alrededor, hacen que pierdas tu autoestima, que pienses por qué soy así? Te hacen pensar que no mereces cosas buenas hasta el punto de que cuando llegan no te las crees, que quién va a querer a alguien como yo, quién va a querer estar con alguien así. 

Pero pasan los años y te paras a pensar y te das cuenta de que lo único que has hecho mal es no ser tú misma por lo que los demás opinasen o dijesen, llega un momento en que te das cuenta de que lo que hiciste mal fue rodearte de gente que no sabe apreciarte tal y como eres, que te hacen cambiar porque es así como ellos quieren que seas, pero es que tú no eres eso, y no debes cambiar por absolutamente nadie, a quién no le guste como eres que pase de largo, que busque a quien realmente sea esa persona que le gusta tal y como es, porque si cambias tu manera de ser no serás nunca feliz, porque siempre tendrás que pensar en ocultar esto o no hacer aquello y no estamos aquí para contentar a nadie, o para hacer lo que la gente diga que hagas. Sé tú misma, sé feliz con quién eres, y acércate a esa gente que te aprecia tal cual eres, sin pedirte que cambies, sin que te diga no escuches esa música o no veas esa serie, o a quién se le ocurre leerse ese libro? 


A mí me costó muchísimos años darme cuenta de esto, por eso cuando conocí a mi chico no podía creerme la suerte que tuve, de haber encontrado a una persona tan maravillosa que no solamente me cuida, me apoya y me quiere tal y como soy, es que además le encanta que sea así, porque con él soy yo, por fin soy yo y no tengo que cambiar absolutamente nada y si al principio pensaba que no me lo merecía, ahora no solo sé que me lo merezco, si no que sé que nos merecemos el uno al otro, porque encajamos a la perfección en todos los aspectos de la vida, porque siempre estamos el uno para el otro y porque lo que lo hace perfecto es que es mutuo, que fluye por ambas partes de la misma manera y no hay nada más maravilloso que eso. Por eso sé que es el amor de mi vida y que es todo lo que he estado buscando pero que apareció cuando dejé de buscar, porque teníamos que conocernos, porque somos el uno para el otro y no pienso soltarme jamás de su mano, porque nos espera una vida entera, una vida de altibajos como todo el mundo, pero una vida en la que nos ayudaremos el uno al otro a superar cualquier problema que se nos presente, porque estando juntos el uno con el otro, no habrá absolutamente nada que pueda con nosotros. Y esa vida que nos espera podrá no tener lujos, pero tendrá felicidad y ese es el lujo más grande de todos. Te quiero, gracias por estar en mi vida.


sábado, 28 de noviembre de 2020

Enamorarse de una mente

 Dicen que si te enamoras de una mente estás perdida, de un físico puedes huir, de un cuerpo puedes huir, pero una mente te atrapa, se instala en tu propia mente y no puedes hacer nada para evitarlo.

Yo no me enamoré de una mente, me enamoré de mente, cuerpo y alma, y ahí amigos míos, ahí sí que estaba atrapada.


Cuando conoces a alguien con el que puedes ser tú misma 100%, que no solo te comprende, si no que te hace ser natural, tener esa confianza y esa complicidad que jamás habías tenido con nadie, que te hace quererte a ti misma cuando esa siempre fue tu asignatura pendiente, que te hace ser mejor persona, que te hace querer ser mejor todavía por él y para él, porque lo merece todo, porque te ha devuelto a la felicidad que creías que nunca ibas a volver a tener, pero ahí estás, dándote cuenta de que cuando creías que eras feliz todavía te faltaba ese ápice de felicidad que él te aporta, que ahora sonríes día a día y que vengan los problemas que vengan, a ti esa sonrisa no te la quita nadie porque le tienes a tu lado.


Cuando nos preocupamos más por el otro que por uno mismo, cuando si tú estás bien, yo estoy bien, cuando si estamos mal hacemos todo lo posible por sacar esa sonrisa. Cuando daría cualquier cosa por hacerte la vida más fácil, cuando daría lo que fuera por no separarme de ti ni un segundo, cuando te daría absolutamente todo sin necesidad de que me lo pidieras, porque sí, por ser tú.


Porque mi vida ha cambiado por ti, desde que llegaste y me hiciste ser mejor, porque no quiero una vida sin tenerte a mi lado, aunque sea en la distancia. Porque me conoces mejor que nadie en el mundo de toda la gente que he conocido hasta el día de hoy, porque solo por ti vale la pena seguir peleando y seguir viviendo en una vida que se empeña en hacer que las cosas nos vayan mal, pero tan mal no nos han ido cuando nos hemos encontrado, hemos coincidido en esta mierda de vida solo para hacer que sea un poquito mejor. Y sabes qué? Que no solo es un poquito mejor, mi vida es infinitamente mejor desde que comparto mi existencia con la tuya. Gracias, por ser, gracias por estar. No te vayas nunca.


jueves, 16 de julio de 2020

Ansiedad

- No - dijo ella. - Esto es lo que me advirtieron, no puedo seguir por este camino.

Las luces parpadeaban en el interior del túnel, sentía el miedo en su espalda, no podía retroceder, pero si avanzaba, sabía lo que ocurriría, un túnel no tiene mucha escapatoria. Dudó por un momento, y se giró, echó a correr con la respiración agitada, no podía ir hacia atrás, ni tampoco hacia el túnel, así que avanzó hacia la derecha, apenas se veía nada, meterse en el medio del bosque no era la decisión más segura, pero allí en el medio de la nada, rodeada de oscuridad, se sentía más segura que entre las luces del túnel con las que podían localizarla. Cuando se cansó de correr se sentó bajo un árbol, intentando controlar su respiración, intentando tranquilizarse escurrió su cuerpo y se hizo un ovillo, se agarró a sus piernas, metió la cara entre sus rodillas y simplemente esperó, con los ojos cerrados, simplemente esperando desaparecer.


 Y así es cómo la ansiedad se apodera de ti, ese momento en que hasta la luz te da miedo y te sientes más segura en medio de la oscuridad donde nadie puede verte ni escucharte y simplemente luchas por intentar respirar con tranquilidad al tiempo que sientes como algo te presiona por dentro y no puedes evitarlo, nadie puede ayudarte porque esa es una lucha interna que sólo tú puedes vencer. Hay veces que la mente te da un pequeño espacio para una tregua, eso no es que estés bien, la ansiedad siempre está al acecho, y es el peor de los enemigos porque es invisible y ataca sin previo aviso, y pasas de estar bien, a de repente parecer que tienes toneladas de litros de agua sobre ti, impidiéndote respirar, impidiéndote ser libre, impidiéndote vivir, y encima sin saber cómo, ni por qué, y sobre todo si vas a poder salir de ahí pronto, tarde, o si llegará otra pequeña tregua antes de volver a arrastrarte a la profundidades...


miércoles, 22 de abril de 2020

Vacío

Días como hoy en los que sólo te apetece apartarte y simplemente desaparecer. Días en los que no eres capaz de prestarle atención a absolutamente nada porque tu mente divaga por océanos de incertidumbre, sin tener la más remota idea de hacia dónde avanzar, cuando ni siquiera sabes de donde vienes.

Minutos que no avanzan, horas eternas y lágrimas que desean salir rompiendo la calma de tus ojos, pero no está permitido rendirse, no hay necesidad de mojar tu rostro, pues no hay razón, más que las infames imaginaciones antes las que te enfrentas en tu mente y contra las que luchas por saber qué hay de cierto en ellas.

Si pudiese elegir simplemente cerraría los ojos y desearía que pasase la tormenta, volver a despertar ante un mundo nuevo en el que saber a ciencia cierta hacia donde avanzar, sin temer nada ni a nadie, pisar con seguridad a cada paso que des y nunca retroceder, ni mirar atrás siquiera, pues lo pasado, pasado está y para bien o para mal, nunca regresará.

Lo que deparará el futuro nadie lo sabe, ese miedo irracional domina nuestra mente, al no saber con qué podemos encontrarnos, por eso a veces es mejor cerrar los ojos y avanzar a ciegas. El riesgo no se empequeñece, pero avanzar observando el vacío y no poder retroceder, es peor que llegar a oscuras y caer sin más, adentrándote en ese hoyo sin fondo en el que no dejas de caer y deseas que pronto aparezca un suelo firme con el que frenar aunque el golpe sea duro, al menos se disipará el temor de no saber si sobrevivirás a semejante caída, simplemente yaciendo sobre un suelo frío y sin forma, sin ningún lugar al que aferrarte, viendo cómo se apaga la luz que dejaste atrás. Y todo acaba, sin dar lugar a más miedos e incertidumbres, simplemente, ya no hay nada. El vacío.

lunes, 26 de agosto de 2019

Realidades imperfectas

Hay personas que llegan a tu vida para cambiarla, nunca se sabe si a mejor o a peor, pero esas personas siempre son importantes y desde el primer hola ya te tienen atrapada en su mundo, para no soltarte y estás perdida para siempre. Algunas de esas personas se convierten en amigos, y de otras... te enamoras.

En ese momento tu imaginación se dispara, empiezas a soñar con los ojos abiertos, con escenas que a lo mejor nunca llegan a cumplirse, pero la sonrisa que te crea, la falsa felicidad de un momento perfecto que no existe te sirve para evadirte de la vida real, de la vida que te ha tocado vivir sin él, de lo duro que es depertarte y que no esté contigo, de que ni siquiera lo sepa porque no te atreves a decírselo por si le pierdes, porque el temor a perder su amistad es más fuerte que cualquier otra cosa y te conformas, te conformas con sentirle desde lejos, con pensar maravillada cuan fantástico sería pasear de su mano, lentamente bajo la lluvia o bajo ese sol abrasador que odias pero que con él te parece perfecto, como cualquier cosa si él está cerca, contigo.

viernes, 23 de agosto de 2019

Reflexionando entre letras

Escribir es una de las cosas que más difíciles me resultan. No el hecho de escribir palabras en sí, más bien el hecho de unir esas palabras creando historias, historias que tengan sentido, historias que enganchen, que enamoren, que te hagan sentir.

Por eso aquel día que me vino la inspiración no lo dudé y cogí el bolígrafo y la libreta y empecé a escribir, ¿quién sabe si tendría sentido lo que allí se creara? La inspiración es muy traicionera y de la misma forma que llega sin avisar también se va, y si dudas un solo momento se aleja de ti y a saber cuando regresa.

lunes, 19 de agosto de 2019

El destello

Aquel destello me despertó, froté mis ojos y los abrí suavemente, por si acaso esa luz volvía a aparecer.

Estaba tumbado en mi cama, no sabía que podría ser esa luz, era de noche, la persiana estaba cerrada,un relámpago no se vería, además, se escucharía el trueno segundos después…

Me levanté y miré el reloj, las 4:53, maldita sea, qué mala hora para desvelarse, mi madre estaría durmiendo así que procuré no hacer ningún ruido, fui andando sigilosamente hacia el comedor, la persiana estaba abierta y me asomé, no había un alma en la calle, solo se oía el suave murmullo del viento acompañado de algún pájaro nocturno o madrugador. Las farolas estaban encendidas, jugando a dibujar las sombras de los coches que permanecían aparcados.